Poner en un cazo en el fuego y verter la leche, la mantequilla, el azúcar, la sal y un trozo de la corteza de limón.

Cuando la leche rompa a hervir, retirar la corteza de limón y agregar la harina, retirar el cazo del fuego y remover constantemente hasta obtener una pasta fina.

Volver a poner el cazo a fuego muy suave y seguir removiendo hasta que la mezcla se espese y empiece a pegarse en el fondo del cazo.

Retirar del fuego y añadir los huevos, de uno en uno, amasando bien entre cada uno.

Calentar abundante aceite en una sartén de paredes altas o una cacerola y freír la masa procurando que los buñuelos no se peguen entre sí; una vez dorados retirar y escurrir.

Espolvorear los buñuelos con canela en polvo y acompañar de mermelada.

 Versión para imprimir

Fuente:
Contribución: espaciorecetas 10/01/2007 09:20

• Flan de leche
• Morcilla de chocolate
• Tarta de 3 chocolates
• Puding de melocotón
• Glasa para decorar galletas

Al igual que los mayores, los niños deberían beber bastante agua durante el día para favorecer la digestión, el transporte de nutrientes a las células del cuerpo, la regulación de la temperatura corporal y el buen funcionamiento del aparato circulatorio. Pero es difícil que un niño se pare a beber agua con regularidad, por eso los expertos recomiendan recurrir a alimentos con gran cantidad de agua como la gelatina. Este postre, tan popular fuera de nuestras fronteras, está compuesto, básicamente, por proteínas y agua, es baja en calorías, libre de colesterol y no contiene materia grasa.

Más curiosidades [+]