Salsa que va bien tanto para la carne como para el pescado.

Derretir la mantequilla en un cazo, incorporar harina y dorar ligeramente.

Verter el caldo y los guisantes, cocer a fuego suave unos 10 minutos.

Mezclar la yema con la crema de leche, verter lentamente en la salsa sin dejar de remover y añadir el zumo de limón, sal y pimienta.

Incorporar la carne o pescado a lo que se quiere acompañar y dar un hervor.

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Contribución: espaciorecetas 12/02/2007 04:39

• Pesto Genovés
• Salsa boloñesa
• Mojo picón rojo
• Salsa rosa
• Salsa bechamel

Los poderes de la sal contra el maligno son de sobras conocidos. Si se cae un poco hay que coger un pellizco con la mano derecha y lanzarlo por encima del hombro izquierdo. En Hungría, se tira sal en el umbral de una casa nueva para proteger a sus inquilinos del demonio y, en gran parte de Centroeuropa, se rocían semillas de mostaza sobre el techo de las casas para mantener a los vampiros bien alejados.

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