En una cacerola alta poner el aceite crudo y añadir la cebolla picada y los ajos pelados y enteros, el laurel seco, las bolitas de pimienta negra, el vinagre y la carne cortada en dados.

Se rehoga bien y se pone a fuego lento para que se vaya haciendo en su jugo.

Para que no se quede seco, poner un plato hondo con agua encima de la cacerola a modo de tapadera o si se prefiere ir añadiendo agua según se vaya quedando seco el estofado.

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Contribución: espaciorecetas 17/04/2007 16:19

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• Salchichas blancas al vino
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• San jacobo de ternera

Los poderes de la sal contra el maligno son de sobras conocidos. Si se cae un poco hay que coger un pellizco con la mano derecha y lanzarlo por encima del hombro izquierdo. En Hungría, se tira sal en el umbral de una casa nueva para proteger a sus inquilinos del demonio y, en gran parte de Centroeuropa, se rocían semillas de mostaza sobre el techo de las casas para mantener a los vampiros bien alejados.

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